Las variedades de trigo en el mercado son generalmente el resultado de la línea de cultivo. Después del cruzamiento, la autofecundación y la selección de rasgos específicos, los mejores genotipos se continúan mejorando mediante autofecundación y selección repetidas hasta que la combinación deseada de rasgos está presente en un estado homocigótico. La reproducción de líneas "puras" homocigóticas es un proceso largo que abarca muchas generaciones.

Con la tecnología de doble haploide (DH), se puede lograr la homocigosidad en una sola generación, lo que da como resultado una aceleración de varios años en la obtención de nuevas variedades. La tecnología DH aprovecha el hecho de que las plantas, como parte de su ciclo de vida natural, forman células haploides. Estas células germinales portan un único juego de cromosomas ("haploide"). Por medio del cultivo de células y tejidos, las plántulas pueden regenerarse a partir de células germinales incluso en ausencia de fertilización. Por tratamiento, p. con la colchicina se puede duplicar el número de cromosomas por célula para que la planta vuelva a su estado natural con dos juegos de cromosomas. Solo entonces la planta es fértil y puede producir semillas. Estas plantas se denominan dobles haploides porque el segundo juego de cromosomas corresponde a una copia idéntica del juego único haploide.

Usamos la tecnología DH para producir decenas de miles de plantas DH por año, que ingresan directamente a nuestros programas de mejoramiento y desarrollo de variedades.